Plazo fijo: el Banco Central ya tomó una decisión sobre la tasa tras el dato de inflación
Los precios subieron menos de lo esperado en junio, un 6%. Esa noticia es determinante para la tasa del plazo fijo. ¿Qué decidió hacer el BCRA con los rendimientos?
Desaceleración inflacionaria
«La desaceleración del IPC fue difundida al interior de sus categorías y divisiones. Así, la inflación núcleo se ubicó en 6,5%, el registro más bajo desde enero, reduciéndose en el mes 1,3 puntos porcentuales», resaltó el regulador en el comunicado que difundió. Y destacó que, en la categoría Estacionales y en la división de Alimentos y Bebidas no alcohólicas (AyB) incidió principalmente la desaceleración de las verduras y frutas, reflejando que «fueron disipándose los efectos adversos de la sequía, que en los meses previos presionaron al alza».
Ese es uno de los objetivos buscados por la política económica en esta etapa, por un lado, porque es uno de los requisitos que fija el Fondo Monetario Internacional (FMI) en el programa delineado para Argentina, pero, por otro, porque es “el” recurso que tiene el Gobierno para combatir la tendencia a la dolarización, típica de contextos electorales.
Es por eso que el BCRA recordó en su anuncio que su política de tasa de interés busca «generar retornos reales positivos sobre las inversiones en moneda local, con el fin de preservar la estabilidad monetaria y cambiaria». Y, anticipó, en ese sentido, que continuará «monitoreando la evolución del nivel general de precios, la dinámica del mercado de cambios y de los agregados monetarios a los efectos de calibrar su política de tasas de interés y de gestión de la liquidez».
Plazo fijo: ¿puede bajar la tasa?
Sin embargo, un dato de inflación en del 6% deja margen para que el Central considere bajar la tasa hacia adelante sin necesidad de que pase a terreno negativo el rendimiento. Así, se abre la puerta para que se inicie un camino de descenso de los rendimientos del plazo fijo . Pero los analistas coinciden, en general en que es poco probable que encare ese rumbo, al menos por el momento.
«Creo que, por la inestabilidad que hay, es factible que no muevan la tasa hacia adelante, a pesar de que, ahora, puede quedar larga respecto a los valores de la inflación«, sanciona el economista de EcoGo, Sebastián Menescaldi, en diálogo con Ámbito. “Me parecería una decisión muy extrema bajarla porque se desacelere un poco la inflación”, apunta, por su parte, el director de CyT Asesores Económicos Camilo Tiscornia.
Y es que, según su opinión, deberían subirla más si quieren combatir la inflación de manera realmente contundente. Sin embargo, descarta que se avance en cualquiera de los dos sentidos. “Lo que espero es que la dejen quieta en el corto plazo”, asegura.
Lo mismo sostiene Alejandro Giacoia, economista de Econviews, al señalar que espera que “el Banco Central deje, al menos hasta el próximo dato del IPC, sin cambios la tasa de interés, dado que, actualmente, el rendimiento efectivo mensual es del 8% y eso, con una inflación en el 6%, implica que queda positiva” en 2 puntos porcentuales.
Tasa positiva: un costo necesario
Y, si bien Giacoia reconoce que la tasa real positiva tiene un costo en términos de los pasivos remunerados, apunta que es algo que el Central va a tener que pagar si quiere mantener la calma cambiaria y combatir la inflación. El analista evalúa que esto es algo necesario en este momento y opina que “no hay lugar para bajar la tasa ahora porque se le pueden escapar los dólares paralelos”.
En igual sentido, Menescaldi sostiene que, “por la inestabilidad económica actual, es factible que no la muevan por un tiempo, a pesar de que va a quedar larga respecto a los valores de la inflación”. Lamenta, en esa línea, que la situación es frágil y anticipa que pueden surgir, hacia adelante, cuestiones que disparen la brecha y la inflación. Ya que el gran problema es que la escasez de reservas internacionales y el exceso de pesos que hay provocan la inestabilidad y, según Menescaldi, eso requiere soluciones más de fondo que una política de tasas, como “restringir importaciones o depreciar la moneda”.
En ese contexto, tal como indica Ferrari, “la desaceleración de la inflación es un fenómeno reciente, cuya prolongación no puede asegurarse», por lo que aún parece muy pronto para avanzar en una reducción de tasas. Podría iniciarse ese camino más adelante y en magnitudes poco significativas. Pero, por el momento, tal como se esperaba, el BCRA volvió a mantener el rendimiento del plazo fijo en el 97% anual (8% mensual).
Fuente: ambito.com